Los resultados del último informe anual de ámbito europeo, realizado por la EFSA y el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) ponen de manifiesto una vez más que la resistencia a los antimicrobianos supone un serio riesgo para la salud humana y animal. Este riesgo fue identificado por la Comisión como una de las principales prioridades en su agenda política en materia de seguridad alimentaria.