A pesar de una buena cosecha en Castilla y León, se deberá importar cebada y trigo.

Las necesidade del "granero de España",  de trigo y cebada, entrarán por el puerto.

Los fabricantes de piensos compuestos de Castilla y León, han comenzado a tomar medidas en relación a la falta de disposición de cereal para la fabricación de piensos debido a la retención llevada a cabo por los tenedores del cereal. Ante una buena cosecha, la oferta de cereal en plena campaña en “el Granero de España” no llega para cubrir las necesidades básicas alimenticias de la cabaña ganadera de Castilla y León, y si, además, añadimos el consumo que realizan las plantas de etanol, provocan un panorama bastante preocupante.

Según diversas fuentes, estamos ante una cosecha por encima de la media, lo que hace suponer que debería de haber una oferta que cubriera las necesidades de la cabaña ganadera. La situación actual, sin precedentes, es que no se dispone de cereal local  para poder cubrir toda la demanda de la cabaña ganadera.

Ante esta situación los productores van a realizar las operaciones de importación necesarias, a partir del mes de agosto, para poder cubrir las necesidades básicas alimenticias de la ganadería, y así poder cumplir con la normativa básica de bienestar animal. Dichas operaciones se están realizando con multinacionales extranjeras y  ya se han cerrado  operaciones para los meses de agosto a octubre.

A la ya complicada situación por la que atraviesan las diferentes especies ganaderas, se añade esta situación que agrava aún más  la situación.

Desde ASFACYL se considera que las entradas de cereal por los puertos de Santander, Gijón y Bilbao van a poder satisfacer las demandas de la producción ganadera, lo que contrarestará la especulación y retención por parte de los productores y almacenistas.

Debemos considerar que la importación masiva que se va a realizar por parte de los fabricantes de piensos, se debe a la disponibilidad de cereal que hay en Europa y en el resto de zonas productoras del mundo, en las que se están constatando buenas cosechas,  a las que hay que añadir los excedentes de la cosecha anterior.   

El fin de los fabricantes de piensos compuestos,  es satisfacer las demandas de sus clientes, los ganaderos, los cuales demandan disponibilidad de trigo y cebada.