Impulsores de la evolución viral

Los expertos han identificado como posibles factores de propagación determinadas especies de animales de granja con pelaje (por ejemplo, visones o zorros), que son muy susceptibles a los virus de la gripe. Aunque aún no se ha confirmado la transmisión de mamífero a mamífero, los mamíferos salvajes podrían actuar como huéspedes puente entre las aves silvestres, los animales domésticos y los humanos. Los animales de compañía, como los gatos, que viven en hogares y tienen acceso al aire libre también pueden ser un vehículo potencial de transmisión. La cría en zonas ricas en aves acuáticas con producción al aire libre y/o bioseguridad deficiente puede facilitar la introducción del virus en las granjas y su mayor propagación. Los expertos descubrieron que los fenómenos meteorológicos extremos y el cambio climático desempeñan un papel adicional en la evolución de la situación porque pueden afectar la ecología y la demografía de las aves silvestres y, por tanto, influir en la forma en que se desarrolla la enfermedad con el tiempo.
La reducción de riesgos
Las autoridades de diferentes campos deberían trabajar juntas desde la perspectiva de Una Salud para limitar la exposición de los mamíferos, incluidos los humanos, a los virus de la IA. Debe mejorarse la vigilancia animal y humana, junto con el análisis genómico y el intercambio de datos de secuencias. En las granjas se debe reforzar la bioseguridad para evitar que los animales entren en contacto con la infección y la propaguen.
Próximos pasos
A finales de año, la EFSA y el ECDC publicarán una opinión científica que evaluará cómo podría desarrollarse una posible pandemia de gripe y orientará a los gestores de riesgos para reducir el riesgo para la salud humana.

Fuente EFSA